martes, 16 de octubre de 2012

Romance del Lucero del alba y del atardecer, y la Luna

PORQUE LOS AMORES IMPOSIBLES NO EXISTEN!!!!! El romance entre el Lucero del alba y del atardecer, y la Luna... Apenas se apago el sol, tras el manto oscuro del horizonte, se encendio el lucero... y la luna esquiva, pero coqueta, se le acerco... él parecia no verla, ella lo provocaba todo el tiempo... en su boca estaba el deseo, en su marcha lenta pero segura, su intencion.. Asi fue hasta el amanecer... ella lo miraba anhelante... el parecia seguir solo su camino, en un cielo ya poblado de estrellas, donde el lucero era solo uno mas, entre todas... con todas... pero la luna, no dejaba de seducirlo, ni de buscarlo...sabia que ella era para él, y él para ella... La aurora, dolida por la vision de ese amor imposible, trato de advertirla: -"Él es una estrella, tú solo un planeta... él brillara mucho mas, y desde mucho antes que tu... que solo puedes reflejar la luz del sol que duerme... además, millones de años luz los separan... qué esperas???" La luna, asombrada de las palabras de la aurora, asombrada de que ella no entendiera, suspiro y le dijo ( asi como cuando se explica algo totalmente obvio... aburridamente evidente...) - "Mi amor por él es tan grande, que, supera todas las distancias, y todas las diferencias... y cada amanecer y cada anochecer, todas las demas estrellas se apagan... y quedamos ese instante mágico, maravillosamente solos, con todo el cielo para nosotros dos... ¿de qué amor imposible me hablas entonces?..."

domingo, 7 de octubre de 2012

Filosofia en la cocina

Hace pocos dias, hablando con tanta gente, todas apuradas como yo, todas demasiado comprometidas con una infinitud de cosas y de casos... Todas lamentandose, como yo, de lo rápido que se pasa el día, de lo poco que se puede, la mayoría de las veces, disfrutar de la cotianeidad familiar y afectiva... todos muy apurados, concientes de que descuidamos lo importante por lo urgente... Corriendo una carrera que, en cualquier momento, es detenida por el semáforo rojo de la muerte, que acecha impavido y real, inexquivable... inexorablemente atento... Sin embargo, de la filosofia casera, de la mirada espontanea y pequeña, que suma, sin embargo, a las grandezas que luego se conforman a nuestro alrededor, pude rescatar un pensamiento, compartido con un amigo, de esos que estan alli, aunque no los veamos, de esos con los que se celebran los aciertos, y de vez en cuando se cruza un mensaje, para recordar que, desde el pensamiento y la fe, se conforman redes indestructibles de afectos, amores y cariños... digo, pensaba, Qué bueno!!!! seria que tuvieramos presente, que la vida es como el agua en las manos... mientras pensamos cómo retenerla, ella se va escurriendo, sin prisa, pero sin pausa... y solo nos deja cierta humedad... que tal vez, podemos comparar con la vejez... que para algunos, es un periodo largo, triste, solitario... pero que, yo, llegando a ella, pienso que puede ser la humedad que retiene el recuerdo de tantos momentos vividos, con aciertos y desaciertos, con dolores y risas, con exitos y fracasos, que sirven, de aprendizaje; que enriquecen los proximos brotes de vida que nos rodean: niños, adolescentes y jovenes, que van asomando y que necesitan, aunque no lo pidan, esa humedad que dejo la experiencia en manos de los adultos mayores, para aprender, para estar alertas, pero por sobre todo, para sentirse queridos, valorados e importantes... Gracias, VIDA BENDITA, gracias, Dios, en la forma que lo concibamos... gracias.
A Claudio Robaglio: Canta autor de Nogoya Me dejaste el corazón lleno de coplas, Y en los labios ramilletes de poesía. Los oídos plenos de un nuevo canto, y una nueva mirada de la vida. Me humildad y tu asombró tu grandeza. La potencia de tu voz que trasfundía los dichos de anónimos vivientes, cuyo solo vivir es valentía. Me gusto tu decir de hombres sencillos. Tu brillante mirada clara y límpida. La natural cascada de tu canto. y tu amor por la simpleza de la vida: Esa del milagro cotidiano, esa de la anónima heroína, que no sabe que su chispa trasunta en resplandor de estrellas encendidas. ------------------------------ A Claudio Robaglio II Encuentro fortuito. Sin mirarte bien, adiviné el hombre: Poesía y piel. Canto que hace ecos de un tiempo de ayer. Canto que conozco aún sin conocer. Voz de anonimato. Historias de ser que no hacen historias por su pequeñez. Voz que se hace grito, denuncia, tal vez… ojos soñadores… Poesía y piel.